En Andalucía y en otros lugares de España al malnacido, canalla, traidor, embustero, falso y mala persona se le define genéricamente con el apelativo de hijo de puta o hijoputa o jjoputa, o hijo de la gran puta. Siempre salvaguardando las virtudes de su madre y en atención a sus propios méritos. En fin, para qué extendernos más....
La lista de fechorías sería larga pero, por poner un ejemplo, veamos una de las últimas:
¡Qué asco de impostor y de los que lo apoyan!
¿Se puede caer más bajo que lamerle el culo a Iglesias, Garzón, Esteban, Rufián y Otegui?
España arrastrada al fango por este impostor y convertida en el hazmerreir internacional hasta la más bochornosa irrelevancia.
¡Mal rayo te parta! que decía el gitano...